Segunda visita del Conde a la China, tierra del opio.

Una comprension total de lo real, y de su correlato inexpreso, si fuese instantanea, desvanecería el mundo, y con él, al yo que lo crea, en la infinita emocion del ser completo. Sin embargo, tal emoción o el acercamiento a ella, en una mente no original, sino indirectamente, solamente podría conducir a la locura, y no realmente a la disolucion del mundo original. Sin embargo ninguna mente se encuentra separada de otra, la multiplicidad es apariencia. El fenómeno del inconciente colectivo, es la representación cientifica de esta realidad.



El despertar de la conciencia presupone el ensueño inconciente y lo real se encuentra y pierde en su juego. aquel que sueña con detalle un mundo queda encerrado en el, como en un ensueño profundo. Se dice que sólo el amor, o la inteligencia pueden salvarle: pero el amor no es algo que se pueda encontrar verdaderamente sin ser enteramente digno. Pero quizás la prueba no tenga fin y disponga de nosotros... Pero nuestras muertes y nuestro dolor no habrán sido en vano: ni siquiera reales.



Hay que agotar todas las posibilidades? Cual es la necesidad tan necia que habría que surgir de tal cosa que no pudiese dispensar del camino que lleva a ella?

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De la nada surgió un deseo, necio y solitario, que en su incomunicable soledad soñò y se agotó en el sueño. Murió? Quizás fuese necesario...



Los hombres religiosos se han alejado buscando el extasis mismo de la creación. Hay uno e inevitables infinitos caminos que se hallan y se crean a si mismos. La maxima realidad de la materia es su idea.